El chocolate se hace a partir de los granos del cacao los cuales siguen un proceso de fermentación, secado, tostado, molido, refinado y procesamiento. El chocolate se compone de dos ingredientes principales: pasta de cacao y manteca de cacao. Adicionalmente se le añade otros ingredientes (azúcar, emulsionantes, saborizantes).
El porcentaje del cacao determina cuánto cacao tiene un chocolate en función de los otros ingredientes. Por ejemplo, si un chocolate tiene un 50% de cacao, esto quiere decir que contiene 50% de pasta de cacao y el resto se divide en los diferentes ingredientes (azúcar, emulsionantes, saborizantes etc). Cuanto más alto sea el porcentaje de cacao, más puro será el chocolate.
Cuando un chocolate es “sucedáneo” o no indica el porcentaje de cacao, significa que en su elaboración se utilizó otra grasa de origen vegetal en lugar de pasta de cacao, estas suelen ser mantecas o aceites derivados del coco, la palma u otros.